Comunicación Asertiva
La palabra es autóloga, tiene poder propio, sabemos que forma parte de la historia del hombre, para ser uno de los elementos fundamentales dentro del lenguaje. Transmite, comunica y genera un mundo de interrelaciones, haciendo de ese hombre un ser completo.
Tomando conciencia de ese poder de la palabra hay que ser cuidadosos al emplearla porque podríamos incidir de forma agresiva, sumisa o asertiva en los resultados tanto personales como colectivos.
La comunicación asertiva es un derecho que nos compete por el solo hecho de haber nacido, ¿Qué quiero decir con esto?: Que debemos establecer parámetros razonables para recibir un trato justo. La asertividad es un punto medio entre los dos extremos del agresivo y el pasivo; el agresivo gira en su centro y son desconsiderados y hostiles, juegan al “yo gano, tu pierdes”, consiguiendo a lo largo del camino un aislamiento social como resultado. El pasivo es el que se queja de todo, el que no se respeta a si mismo, el débil, juegan al “yo pierdo, tu ganas”, y las consecuencias podrían ser, además del aislamiento social, un destape de “olla a presión”, caer en una depresión y ser víctima del estrés, somatizando con el cuerpo.
Entre estos dos extremos están “los asertivos”, que tienen un profundo respeto a sí mismos, son protagonistas de sus vidas, de sus ideas y de las de los demás, consiguiendo así bienestar personal y de la sociedad a la que pertenecen, y juegan “yo gano, tu ganas”.
La Asertividad es un antídoto del miedo, de la pasividad, de la timidez, incluso de la ira, siendo todas ellas partes de una conducta inmadura e infantil.
Ser asertivos significa, entre muchas cosas, integrar los afectos y, la empatía, ya que estos permiten ser felices, comprender a los demás y tener una intensa escucha activa. Para ello la persona debe cultivar su voz (tonos claros y altos), plantear peticiones razonables, respetando sus derechos como ser humano igual e importante dentro de sus funciones.
Dentro de este marco, en la asertividad, hay que desarrollar la capacidad para expresar emociones negativas sin personalizar el problema. Tiene que saber cuestionar, estar en desacuerdo e incluso ser capaz de confrontar la autoridad desde una perspectiva positiva. La pregunta sería: ¿Porqué o para qué?, no como un signo de rebeldía, sino para conseguir mejores resultados.
En general, la dificultad de comunicarse asertivamente podríamos mejorarla con conceptos desde la neurociencia (PNL) tanto para el liderazgo como para la gestión empresarial. Los tres pilares de la Comunicación Asertiva son: Respeto + Confianza = Credibilidad, sostenidos por una línea de congruencia entre el pensar, el decir y el hacer.
Pamela Guersman
Lic. Master Practitioner of NLP
pamela@pamelaguersman.com.ar
Lic. En Fonoaudiología de la Universidad de La Plata, especializada en Comunicación, La Voz y Las Emociones, con formación Gestáltica y en Análisis Transaccional, Master Practitioner Internacional en PNL (Programación Neurolingüística) avalada por el Consorcio Internacional de PNL de Richard Bandler, John La Valle y Rod Fuentes. Posee amplia experiencia como relatora en diferentes cursos de Comunicación en el NOA, relatora en programas de Radio y Televisión, colaboradora de cursos de Trances Conversacionales con PNL en Brasil y España. Por su trayectoria y los cursos realizados ha llegado a ser LA VOZ DE LA PNL EN EL NOA.