Ex-Hacienda El Lobo: un lugar espectacular en Querétaro.

En 1550 empieza un gran desarrollo de las haciendas en Querétaro al encontrarse en la Ruta de la Plata.

Las haciendas de Querétaro son piezas del gran rompecabezas de la historia de México, además de su valor histórico, estos antiguos edificios poseen una belleza que seduce a cualquier viajero.

Durante el Virreinato, las Haciendas en Querétaro se convirtieron en un importante polo de desarrollo y riqueza. Hoy en día, muchas de estas viejas haciendas forman parte del Camino Real Tierra Adentro, declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO.

La historia de la Ex-Hacienda El Lobo se remota a 1690-1713 ya que en esas fechas se tienen registros de la fundación de la Hacienda y cada uno de sus rincones entramos huellas de nuestro pasado.

En 1790 se identifica en los registros históricos como propietarios a la familia Fagoaga.

En 1858, esta propiedad fue rentada por la familia Sánchez Tagle al General Tomás Mejía (Gobernador de Querétaro el 13 de agosto de 1858).

En 1867 Don Amado Mota y Doña Dominga Ugalde adquieren “El Lobo”.

Tras la muerte de Don Amado Mota, “en 1867 El Lobo” queda en manos de Doña Josefa de la Mota de Rosano.

Posteriormente 1923 pasó a manos de la Fundación de Beneficencia Privada Ignacio Torres Adalid y en 1957 las tierras que quedaron del reparto fueron vendidas a la Familia Iturbe.

En 1923 la Fundación de Beneficencia Privada Ignacio Torres Adalid adquiere la propiedad y en 1957 las tierras que quedaron del reparto fueron vendidas a la Familia Iturbe.

Debido a los cambios políticos del país entre 1935 y 1943 en menos de una década las tierras de haciendas en México fueron reclamadas por la Comisión Mixta Agraria.

En 1957 las tierras que quedaron del reparto fueron vendidas a la familia Iturbe.

En 2013 inicia la recuperación de la ex-hacienda por parte de un grupo de empresarios encabezados por la familia Flores Urbina quienes han llevado a cabo

la restauración de esta arquitectura histórica supervisada por el INAH. Esta edificación tiene en sí mismas un alto valor arquitectónico e histórico y conserva su estructura original.

Cuenta con un hotel con 50 habitaciones de lujo, una capilla, salones para todo de tipo de eventos como congresos, business meetings y exposiciones, así como con espacios modernos que se ajustan a las necesidades todo tipo de evento.

Al lado del jardín novohispano de la ex-hacienda, se encuentra el Restaurante "Los Olivos" encabezado por el Chef Chrystian Lardizabal que ofrece comida tradicional mexicana con los platos icónicos de México preparados con ingredientes locales.

Se pueden llevar a cabo bodas, primeras comuniones, comidas empresariales, para lo cual cuentan con varios espacios muy amplios: un auditorio, capilla, espacio para ceremonia civil, jardín original novohispano, villas y varios patios.