Los olvidados del podio: el eterno segundo lugar y las historias no contadas

Por: Lorena Meeser.

Cuando el segundo lugar también es una medalla pesada

El segundo lugar es un espacio extraño: se aplaude, pero no se celebra. Es un limbo entre el éxito y el fracaso, un lugar donde muchos han quedado atrapados, marcados no por su talento, sino por la sombra de quien fue primero. Aunque su esfuerzo puede ser igual o incluso mayor, el reconocimiento rara vez llega con la misma intensidad.

Desde los escenarios de Hollywood hasta las pistas olímpicas, la historia está llena de "segundos lugares" cuyo talento pudo haberlos hecho brillar más que el protagonista, pero el guion de la vida no siempre sigue el camino lógico.

El "Harry Potter" que casi fue

Pocos saben que el actor británico Liam Aiken estuvo a punto de ser Harry Potter. Chris Columbus, director de las dos primeras películas de la saga, lo quería para el papel. Sin embargo, J.K. Rowling insistió en que el protagonista debía ser británico, descartando a Aiken. Ese "casi" cambió su carrera. Aiken siguió trabajando, pero nunca alcanzó la fama meteórica de Daniel Radcliffe.

También se recuerda a Tom Felton, quien audicionó para el papel de Harry y de Ron, pero terminó interpretando a Draco Malfoy. Aunque se hizo un nombre, siempre ha confesado en entrevistas que durante años sintió que "se quedó cerca, pero no lo suficiente".

Grandes papeles, grandes pérdidas

La industria cinematográfica está llena de actores que estuvieron a un paso del estrellato. John Travolta rechazó el papel de Forrest Gump, que luego ganó Tom Hanks. Y Gwyneth Paltrow estuvo cerca de ser Rose en Titanic, papel que convirtió a Kate Winslet en un ícono.

Más curioso aún, Eric Stoltz fue el Marty McFly original en Back to the Future. Filmó varias escenas antes de ser reemplazado por Michael J. Fox. Stoltz jamás volvió a ocupar un papel de ese nivel, y esa experiencia lo marcó tanto que abandonó parcialmente la actuación para dedicarse a la dirección.

En el deporte, el segundo lugar puede doler más que el último

La medalla de plata puede ser psicológicamente más difícil de digerir que el bronce. Un estudio publicado por Psychological Science encontró que los atletas que obtienen el segundo lugar experimentan más frustración que quienes quedan terceros. ¿La razón? Están más cerca de lo que no consiguieron.

Un caso emblemático es el del gimnasta Paul Hamm, campeón olímpico en Atenas 2004, quien años después fue derrotado por décimas en pruebas clasificatorias. El deportista que quedó en segundo lugar, Yang Tae-young, fue foco de una controversia por puntuaciones incorrectas, pero nunca se le otorgó el oro. Ese "casi" lo persiguió toda su carrera, alimentando su decisión de retirarse temprano.

El síndrome del actor de reparto

En el teatro y en la televisión, muchos actores de reparto o "understudies" (suplentes) viven bajo el peso de ser excelentes, pero no protagonistas. La actriz Patti LuPone, ícono de Broadway, ha hablado sobre cómo los actores suplentes, incluso cuando son mejores que los titulares, raramente reciben el reconocimiento que merecen.

Del mismo modo, la figura del "segundo favorito" es habitual en concursos de talento, como American Idol, donde muchos ganadores desaparecen, pero los subcampeones —como Jennifer Hudson o Adam Lambert— terminan teniendo carreras más sólidas.

El lado oculto del segundo lugar: autoestima, relaciones y futuro

Según expertos en psicología deportiva y del rendimiento, como la doctora Susan Krauss Whitbourne, quedar en segundo lugar repetidamente puede tener efectos ambiguos: “Algunos lo usan como combustible para seguir adelante, otros lo toman como un mensaje de insuficiencia perpetua”.

En relaciones personales también hay impacto. La presión de “casi” ser el mejor puede generar inseguridad o comparación constante. En otros casos, impulsa a las personas a perfeccionarse, incluso con mayor humildad que los ganadores.

Cuando el tiempo pone las cosas en su lugar

Curiosamente, algunos segundos lugares terminan por superar a los campeones. Steve Jobs, por ejemplo, fue despedido de Apple, su propia empresa, en los años 80. Quedó relegado mientras otros tomaban el control. Años después, volvió y revolucionó la tecnología. El "segundo", al final, fue el primero.

¿Y si el segundo lugar fuera el más humano?

El segundo lugar representa algo profundamente humano: la lucha sin la garantía del triunfo, la gloria sin el trofeo. No todos los que ganan son recordados, pero muchos que estuvieron cerca permanecen en la memoria colectiva como ejemplos de constancia, resiliencia… y humanidad.

Actores y actrices rechazaron papeles que luego se convirtieron en icónicos.

• Matt Damon: En 2021, Damon mencionó que le habían ofrecido el papel principal en "Avatar" pero lo rechazó por otro proyecto.

• Denzel Washington: Se ha dicho que Denzel Washington no aceptó interpretar a John Doe en la película "Seven" porque el papel le pareció demasiado similar al personaje de John Doe en "El silencio de los corderos", que ya había interpretado. 

• Will Smith: Will Smith rechazó el papel de Neo en "Matrix" para hacer una película western llamada "Wild Wild West". También rechazó el papel de Django en "Django Unchained" por no querer ser un personaje pasivo y porque prefirió una historia de amor a una de venganza. 

• Al Pacino: Se rumoreó que Al Pacino rechazó el papel de Han Solo en "Star Wars" porque no entendía el guion. 

• Madonna: Madonna rechazó el papel de Gatúbela en "Batman Returns". 

• Michelle Pfeiffer: Michelle Pfeiffer rechazó el papel de Thelma en "Thelma and Louise" por un conflicto de agenda. 

• Michael J. Fox: Se ha dicho que Michael J. Fox rechazó el papel de Sam Wheat en "Ghost". 

• Halle Berry: Halle Berry rechazó el papel principal en "Speed". 

• Rachel McAdams: Rachel McAdams rechazó tres veces el papel de Andy Sachs en "The Devil Wears Prada". 

• David Schwimmer: David Schwimmer rechazó el papel de agente J en "Men in Black". 

• Elvis Presley: Se rumoreó que Elvis Presley rechazó el papel principal en el remake de "A Star Is Born" (1976). 

• Emily Blunt: Emily Blunt rechazó el papel de Black Widow en el universo cinematográfico de Marvel (MCU) debido a un conflicto de agenda. 

• Viggo Mortensen: Viggo Mortensen rechazó el papel de Wolverine en la saga de X-Men. 

• Gary Oldman: Gary Oldman rechazó el papel de Edward Scissorhands en "Edward Scissorhands". 

• Eddie Murphy: Eddie Murphy rechazó el papel principal en "Los Cazafantasmas". 

• Tom Cruise: Se rumoreó que Tom Cruise rechazó el papel de Tony Stark/Iron Man en el MCU. 

• Sean Connery: Sean Connery rechazó el papel de Gandalf en "El Señor de los Anillos". 

• Julia Roberts: Julia Roberts rechazó el papel principal en "Shakespeare in Love". 

• Nicolas Cage: Nicolas Cage rechazó el papel de Rocky Balboa en "Rocky". 

• Mark Wahlberg: Mark Wahlberg rechazó el papel de Steve Martin en "El secreto de la montaña". 

• Tom Holland: Tom Holland fue considerado para el papel de Neo en "Matrix". 

• Elizabeth Olsen: Elizabeth Olsen fue considerada para el papel de Khaleesi en "Juego de Tronos". 

Estas son solo algunas de las historias de actores y actrices que rechazaron papeles icónicos. Las razones de sus decisiones son diversas, pero a menudo incluyen conflictos de agenda, desacuerdos con la dirección o el guion, o simplemente una falta de interés en el papel.